Cuando tienes hijos, y estos son los primeros, el hecho de un embarazo y una nueva vida, a veces no es algo que ellos quieran. De hecho, pueden sentir celos y sentirse desplazados por las atenciones que recibe el pequeño.
Por eso, para evitar este problema y que los hermanos mayores no se sientan mal, hay que llevar a cabo una serie de estrategias que ayude a estos a entender que llega un hermanito (no un problema para ellos). ¿Y cuáles son estas? Aquí te dejamos algunas de las más efectivas.
Comunicación abierta y positiva
Muchos padres tienen miedo a hablarles a los hijos de que van a tener un hermanito. Y esperan lo máximo posible para decírselo, cuando ya es evidente que no se puede ocultar.
Pero los niños no son tontos y los cambios de rutina, las conversaciones con las personas, etc. hará que se enteren y que piensen que, si no se lo han dicho, es porque puede pasar algo malo con él o ella.
Por eso, intenta hablar con los hermanos mayores sobre la llegada del nuevo bebé en cuanto lo sepáis. De esta manera lo harás partícipe y también ayudarás a que pueda asimilar mucho mejor las emociones y las responsabilidades de un hermano mayor.
El hecho de implicarlo y decirle todo hará que no se sienta desplazado y podrá participar en el embarazo desde pequeño.
Involucrar a los hermanos mayores en el embarazo
Tal y como te decíamos antes, el que los hermanos mayores participen en el embarazo casi desde el primer momento es algo que les ayuda a entender que llega un bebé y que será una persona que estará relacionado con él o ella.
Por eso, que le permitas participar en la decoración de la habitación del bebé, en la ropa que va a llevar, o incluso en que pase tiempo con él (aun estando en la barriga), escuchando música, hablándole… ayudará a que no lo vea como una amenaza, sino todo lo contrario.
Ayúdate de los libros y los recursos educativos
Utilizar libros y recursos educativos te puede ayudar a abordar la llegada del bebé de forma positiva. Y es en que en las librerías y bibliotecas hay muchos libros que explican a los niños mayores el concepto de tener un hermano pequeño.
De hecho, no sólo vas a encontrar esos libros, sino que también tienes otros enfocados a los padres con estrategias que ayuden a que los hermanos se lleven bien, que no se vean como rivales, etc.
Dale el papel que tiene
En este caso nos estamos refiriendo a que le hagas entender que será un hermano mayor, y que ese nuevo rol es un papel esencial que debe recibir con orgullo.
Para ello, tendrás que explicarle qué hacen los hermanos mayores e involucrarlo en tareas pequeñas que le puedan divertir (o ser curiosas). Por ejemplo, que decida qué ropa va a llevar el bebé, que te ayude a cambiarle los pañales, a bañarlo, o incluso a darle de comer cuando sea un poco más grande (o si toma biberón).
El hecho de hacerle ver su nuevo rol hará que se sienta responsable y parte de la familia, lo cual puede evitar los celos entre ellos.
Antes del nacimiento, pasa tiempo con los hermanos mayores
Hacer salidas juntos, disfrutar de una tarde juegos en casa… Cualquier actividad que lleves a cabo con los niños la disfrutarán, pero también estarás creando recuerdos especiales.
Ahora bien, un error habitual que cometen los padres es que, cuando llega el bebé, ya no tienen tiempo para esas actividades. Es cuando los hermanos pequeños ven a los bebés como «algo que les ha robado a sus padres». Por eso, no te olvides de seguir pasando tiempo de calidad con ellos.
Si lo mantienes, no verán como un problema a ese bebé, sino como parte de la familia porque sabrá que hay momentos para pasarlos juntos, otros solo él con los padres, y otros solo el bebé con los padres.
Presta atención a los sentimientos de los hermanos mayores
El hecho de la llegada de un nuevo bebé hace que los hermanos mayores experimenten una variedad de emociones, incluidos celos o inseguridades.
Debes estar atento a reconocer esos sentimientos y a abordarlos cuando salgan para que entienda que no es nada malo sentir lo que siente. Tienes que comprenderlo y al mismo tiempo hacer que él comprenda lo que le pasa y por qué le pasa, pero también si está equivocado o no en lo que hace.
La primera visita al hospital: también con los hermanos mayores
Muchas veces, cuando la madre se pone de parto, no se le dice nada a los niños y pueden encontrarse con un bebé por sorpresa, o que les digan que ya ha nacido pero no los lleves al hospital.
Verás, la primera visita al hospital, en un terreno neutral, puede ser una buena opción. Los hermanos mayores estarán nerviosos, ilusionados e incluso preocupados. Pero el hecho de participar en ese momento, incluso de comprar un regalo para el bebé y otro para la madre puede ayudarles a ir asimilando la nueva situación.
De hecho, te recomendamos que antes de llevarlos les expliques bien lo que va a pasar, o lo que van a ver. Eso les tranquilizará.
¿Se te ocurren más consejos para lidiar con la llegada de un bebé teniendo hermanos mayores?
