En tu camino hacia la maternidad, es normal que el parto sea una de las partes que más miedo te dé. Sabes que es el final del embarazo y que, en cuestión de horas desde que empieza ese momento, podrás ver la carita de tu bebé. Pero tener sentimientos encontrados de ese momento es totalmente normal.
Por eso, en esta ocasión, queremos ayudarte a tranquilizarte. Y lo hacemos comentándote los diferentes métodos de parto disponibles para que puedas tomar una decisión informada sobre cómo deseas dar a luz a tu bebé. ¿Quieres saber cuáles son?
Parto vaginal
Este es el método más común y se refiere al parto de un bebé a través del canal de parto natural. En este caso, debes saber que hay dos tipos de parto natural: por un lado, el que se hace sin ningún tipo de intervención, es decir, se deja al cuerpo que dé a luz de manera natural sin influir en él (salvo que por problemas con la madre o el bebé haya que hacerlo); por otro lado, el parto natural pero con el uso de analgésicos o analgésicos epidurales para aliviar el dolor. Este es el más habitual hoy día ya que ayuda a paliar los dolores que sufren las futuras madres para que el bebé quepa por el canal.
Del parto vaginal hay muchas ventajas, como el hecho de que provoca menos complicaciones y hay un menor tiempo de recuperación, hay menos riesgos tanto para la madre como para el bebé y, por otra parte, la madre tiene una sensación de controlar y participar en el parto, ya que el esfuerzo lo hace ella misma.
Ahora bien, no hay duda de que el parto vaginal es doloroso y muchas veces hay que recurrir a los analgésicos o epidurales para sobrellevarlo. Además, debido a que el canal del parto es estrecho, hay más probabilidades de sufrir episiotomía o desgarros vaginales, que traen consigo problemas para la madre.
Cesárea
La cesárea es una cirugía en la que se extrae al bebé a través de una incisión en el abdomen. Los propios médicos tratan de no hacerla porque hay estudios en los que se dice que el bebé sufre más con este método de parto, pero lo cierto es que en algunos casos es la única forma de dar a luz. Esta puede ser programada con anticipación si hay riesgos para la salud de la madre o del bebé, o bien de emergencia si es necesario.
En general, la cesárea es uno de los métodos más seguros cuando hay complicaciones médicas o bien se pone en riesgo la salud del bebé o de la propia madre. Además, al poderse programar, se sabe a ciencia cierta la fecha del parto, pudiendo así tener un pequeño margen para elegir el día del nacimiento de tu hijo. Eso sí, hablamos de una cirugía mayor, lo que implicará que la recuperación va a ser más larga y se tiene riesgo de infección y de problemas a la hora de la lactancia o la crianza del pequeño mientras te recuperas.
A esto debes sumarle que puedes tener un mayor riesgo en un futuro embarazo.
Parto en casa
Algunas mujeres eligen dar a luz en el hogar, con la ayuda de una partera o una doula. Es otra opción de método de parto que tienes pero solo se le ofrece a aquellas mujeres que no van a tener riesgos a la hora de dar a luz. Aun así, es posible que se prepare un operativo para que, si algo sale mal, trasladarte de manera inmediata al hospital para evitar pérdidas (de la madre o del bebé).
Entre las ventajas que puedes tener no hay duda de que la principal es el hecho de sentirte más relajada al estar en tu casa y además es la propia embarazada la que participa y controla. Podríamos decir que es algo como el parto natural sin ningún tipo de analgésicos solo que, en lugar de hacerlo en el hospital, se lleva a cabo en casa.
Parto en centro de partos
Este método no es tan conocido, pero en realidad existe. Debes verlo como una opción intermedia entre el hospital y el hogar. Y es que, en la misma casa o en un centro especial, son los médicos los que atienden a la embarazada en el parto. También aquí tienes el control y la participación en el parto solo que, en lugar de hacerlo con una partera o una doula, la ayuda vendrá a través de médicos especializados.
¿Por qué no se conoce tanto? Debido a que solo está disponible en algunos lugares del mundo y además puede ser costosa (porque por lo público es posible que no se oferte y tendría que pagar o ver si con un seguro de salud privado se ofertara).
Ya has visto que hay varias opciones para elegir cómo deseas dar a luz a tu bebé. La decisión no solo debes tomarla tú sino que es importante que hables con tu médico o partera para entender las ventajas y desventajas de cada opción. Así, podrás decidir cuál es la mejor para ti y tu bebé.
