Cada vez estás más cerca de dar a luz. En la semana treinta y seis de embarazo tu cuerpo ya se está preparando para el momento del parto y lo mismo le ocurre a tu bebé.
Es por eso que queremos ayudarte a que entiendas que va a ocurrir en la semana 36 de embarazo y todos los cambios que vas a sentir en tu cuerpo y también en el bebé. Vamos a ello.
Cómo está el cuerpo de la embarazada en la semana 36 de embarazo
A estas alturas de embarazo es muy normal que ya estés cansada de todo. Tendrás los pies hinchados e incluso notarás todo el cuerpo hinchado. Tu tripa apenas te dejará moverte y es muy posible que duermas mal y que te duela la espalda sobre todo.
Pero lo cierto es que durante esta semana vas a tener que aguantar algunos cambios más como por ejemplo:
Bajada de tu tripa
Quizá a priori no lo notes pero durante esta semana tu tripa de embarazada va a estar más baja. Esto es debido a que el feto se encajona en la zona de la pelvis de tal manera que se prepara para iniciar su camino por el canal del parto.
El problema es que al encajarse en la pelvis el feto suele provocar dolores postales y también problemas digestivos como puede ser el reflujo gastroesofágico cuando comes.
Flujo vaginal
Otra de los cambios que vas a notar en el embarazo es que durante esta semana tendrás un mayor flujo vaginal. He hecho es posible que te plantees el haber roto la bolsa y te preocupes por si le pasa algo a tu bebé.
El flujo vaginal tiene la característica de ser mucoso y de color blanquecino. Por su parte el líquido amniótico puede ser transparente y acuoso salvo que lo que eches sea el meconio que es de color verde.
Falsas contracciones de parto
En realidad, las contracciones te van a acompañar durante varias semanas y las notarás todo el día. Son las llamadas contracciones de braxton Hicks. Estas se caracterizan por ser contracciones irregulares, que no aumentan de intensidad, que no son dolorosas y tampoco rítmicas. Si te pasan ya puedes saber si son contracciones de parto o no.
Cribado de preeclampsia
Una de las pruebas que tendrá que realizar en el embarazo durante esta semana es el cribado de preeclampsia.
Normalmente ya te habrán hecho algún estudio en el segundo trimestre del embarazo ya que suele aparecer a partir de la semana 20. Pero si no has tenido ningún síntoma durante la semana 36 de embarazo se suele realizar otra prueba para saber si se está en riesgo de tener la presión alta y problemas a la hora del parto que puedan afectar al feto.
En caso de que sea así lo más normal es que se adelante el parto para evitar factores de riesgo.
Cómo está el bebé en la semana 36 de embarazo
Ahora que ya conoces los cambios que vas a sufrir en el cuerpo durante esta semana de embarazo lo normal es pensar en que el bebé también va a cambiar aunque mucho menos de lo que esperas.
Para empezar, con respecto a la semana anterior el bebé habrá cogido cerca de un kilo lo que le sitúa en aproximadamente los tres kilos de peso. También habrá ganado en medición y seguramente estará listo para salir adelante en caso de un parto.
Tu bebé ya tiene muy poco espacio en el útero porque es muy grande y lo normal es que cualquier movimiento que haga lo sientas, a veces demasiado y de forma dolorosa.
Uno de los cambios que ya anticipábamos en la semana anterior es que la piel del bebé estará lisa y rosada. Esto es debido a que se va acumulando grasa para mantener la temperatura una vez que nazca.
El feto suele colocarse en posición cefálica, es decir que ya tiene la cabeza encajonada en la pelvis de la madre. Pero también puede darse el caso de que esté de nalgas o incluso de costado. En algunos casos se suele recomendar realizar una maniobra obstétrica con el objetivo de darle la vuelta al bebé y colocarlo de manera adecuada para evitar el tener que realizar el parto mediante cesárea.
Hablando de su cabeza debes saber que aunque tiene los huesos del cráneo que ha desarrollado estos no se terminan de fusionar y tardará en hacerlo un par de años una vez que haya nacido.
Como ves, la semana 36 de embarazo te acerca mucho más al momento decisivo. Esto no quiere decir que no te puedes poner de parto ya en esta semana. Y aunque se le considerará un bebé prematuro en realidad tiene muchas probabilidades de salir adelante sin ningún problema. Lo más importante es que tú estés tranquila y aguantes lo último que queda para ver a tu bebé y tenerlo entre tus brazos.
