Qué pasa en la semana 40 de embarazo

Embarazo

¡Ha llegado el día! O mejor dicho, la semana de embarazo en la que estarás muy emocionada y al mismo tiempo muerta de miedo. Y es que, la semana 40 ya es la última, aunque debemos avisarte que no quiere decir que tu bebé más allá de esa semana no siga en el vientre.

Pero, ¿qué pasa en la semana 40 de embarazo? ¿Cómo está el bebé? De todo eso de lo que vamos a hablarte a continuación.

El cuerpo de la embarazada en la semana 40

Mujer en estado de embarazo con zapatillas para su hijo

Tal y como te decíamos al principio, llegar a la semana 40 no quiere decir que a lo largo de esos días vayas a ponerte de parto. En realidad, hay bebés que están tan cómodos en la tripa de su madre que deciden quedarse unos días más. Y otros, sin embargo, tienen tantas ganas de nacer que lo hacen antes de llegar a la semana 40.

Pero bueno, si es tu caso y has acabado llegando a esta semana de embarazo, seguro que querrías saber qué pasa con tu cuerpo. Y de eso mismo es de lo que te hablamos:

Cansancio acumulado por el embarazo

No hay duda de que durante nueves meses has pasado por mucho. Sobre todo, a nivel hormonal y a nivel de órganos. Porque, si no sabes, estos han tenido que moverse en tu cuerpo para dejar espacio al bebé (y luego tendrán que volver a su sitio).

Todos esos cambios sufridos pasan factura y es totalmente normal que estés agotada del embarazo. Pero tranquila, porque ya no queda nada.

Contracciones

Uno de los avisos de que se aproxima el parto son las contracciones. Estas empezarán espaciándose en el tiempo. Pero debes estar pendiente de ellas y medirlas para saber si se van acortando. Porque, si es así, entonces podría indicar que te has puesto de parto y deberás acudir a urgencias de inmediato para que puedan valorarte y comience el proceso del parto.

Preparación para el parto

Tu cuerpo es sabio, y desde hace unas semanas se ha preparado para el momento de dar a luz. La señal más directa que te puede mandar tu cuerpo es romper aguas, que se le dice así a cuando el saco amniótico del bebé se rompe y echas el líquido por el útero. Eso indicará que no hay vuelta atrás y que ya el parto se ha iniciado.

Retraso en el parto

Ahora bien, como te decíamos antes, el hecho de que estés en la semana 40 de embarazo no quiere decir que tenga que nacer sí o sí. En realidad, hasta la semana 42 de embarazo los médicos no lo consideran retraso ni van a provocar el parto (o cesárea). Así que tendrás que armarte de paciencia.

Dilatación

Aunque siempre se dice que es en el momento del parto cuando el útero empieza a dilatar, en realidad hay un periodo antes que también se va produciendo ese ensanchamiento, aunque más débil y sobre todo a nivel interno.

Cuando es el primer parto, la dilatación tiende a durar de 12 a 14 horas, a veces incluso más. El resto suelen variar pero normalmente se dilata más rápido.

En cuanto a la expulsión, si eres madre primeriza tardarás 1-2 horas mínimo. Y la expulsión de la placenta, como mínimo 15-30 minutos.

Todos estos tiempos se acortan en los siguientes partos.

Cómo está el bebé en la semana 40 de embarazo

Cómo aumentar las posibilidades de quedar embarazada

Tu bebé ya está bien crecidito. Pesará unos 3,5 kilos y medirá 51 centímetros aproximadamente. Recuerda que son datos medios, habrá niños o niñas que pesen más o menos y que midan más o menos.

Todo en tu bebé está formado, y aunque no podemos decir que esté completo o maduro, sí que lo tiene todo listo para empezar a funcionar. Eso sí, cuidado con su estómago, porque todavía es inmaduro y solo puede tolerar la leche, de ahí que no se recomiende darle nada más (aunque a menudo se le suele dar agua o manzanilla).

En cuanto a su esqueleto, te darás cuenta cuando lo tengas entre tus brazos, pero los extremos de los huesos más largos y las puntas de los dedos de manos y pies son de cartílago, no estarán tan endurecidos como otra parte de su cuerpo.

Y hablando de huesos, la cabeza no estará del todo cerrada (y protegida). Es así porque es un mecanismo para permitir que el bebé pueda pasar más fácilmente por el canal de parto.

Por su parte, debes saber que el cordón umbilical que lo mantiene conectado a ti es ya tan largo como el propio bebé. Pero también peligroso. Y es que si se enrolla en el cuello del bebé podría ahogarlo y habría que tomar una decisión rápida para salvarle la vida.

Como te decíamos, aquí terminaría el embarazo, pero hay bebés que deciden quedarse un poquito más. Así que, si todavía no nace, no va a tardar mucho más. Y en ese momento podrás verlo y disfrutar de él durante mucho tiempo. ¡Y ya serás madre!

Scroll al inicio