Un embarazo no siempre es algo sencillo, pues trae muchos cambios tanto en nuestro cuerpo como en nuestro organismo que pueden llegar afectar a nuestra salud. Por eso, una de las mayores dudas que pueden surgirte es detectar a tiempo cuando algo no vaya bien.
Para ayudarte a resolver esa duda, hemos recopilado una lista con los signos de alarma en el embarazo, para que puedas comprobar si tienes alguno. En esos casos, lo más recomendable es acudir al servicio de urgencias o a la consulta del ginecólogo.
Aparición de fiebre
La aparición de fiebre nunca es un buen síntoma, incluso en el embarazo. Un cuadro febril durante el embarazo puede ser una señal de que existe algún tipo de infección. En muchos casos es necesario el uso de antibióticos, pero lo más importante siempre es averiguar de dónde procede esa infección.
Si la fiebre es muy alta, te aconsejamos que vayas de inmediato a urgencias para que puedan valorar tu caso y evitar que afecte a tu embarazo (o a tu bebé).
Sangrado vaginal
El sangrado vaginal siempre necesita una revisión médica, independientemente de la semana de embarazo que estés.
En el primer trimestre de embarazo, el sangrado puede ser una señal de un posible aborto. Por ello es preciso realizar un diagnóstico para comprobar que todo está correcto.
Si nos encontramos en el segundo trimestre es necesario comprobar que no exista ninguna lesión en el cuello uterino.
Por último, en el tercer trimestre de embarazo, es importante saber la localización de la placenta, porque a medida que avanzan las semanas el sangrado puede ser provocado por placentas de inserción baja.
Si el sangrado se produce cerca del momento del parto, si es escaso puede ser relacionado a cambios cervicales o por contracciones uterinas. También puede producirse si se han mantenido relaciones sexuales.
Otra opción que puede surgir en cualquier momento del embarazo es debido al aumento de la vascularización del cérvix uterino. El sangrado se vuelve un problema si se vuelve abundante acompañado de un dolor abdominal que no cede. En ese caso deberás acudir a urgencias para que puedan comprobar si se trata de un caso de desprendimiento de placenta.
Prurito palmo-plantar
La aparición de un picor durante el embarazo que se localice principalmente en las palmas de las manos y los pies, que aumenta por la noche, precisa de un control analítico. Todo ello para conocer el estado de los ácidos biliares y del perfil hepático, puesto que puede estar relacionado con la colestasis intrahepática que es necesaria controlar y tratar de una forma minuciosa.
Dolor abdominal
Este dolor hay que tenerlo en cuenta en el embarazo si no cede, sucede de manera continua y no es cómo un cólico. Este tipo de dolor es importante que sea valorado en un servicio obstétrico.
Si estás en el primer trimestre de embarazo, podría tratarse de una gestación ectópica o una torsión quística entre otras cosas. También lo podemos asociar a una infección del tracto urinario, que se suele acompañar de unas ganas continuas de orinar que precisa de un tratamiento para evitar una infección renal.
Otra opción es un dolor intenso asociado a la tripa dura. Es probable que se trate, como ya hemos descrito antes, de un probable desprendimiento de placenta.
Contracciones uterinas
Las contracciones uterinas son algo normal durante el periodo final del embarazo, pero si se producen de una forma precoz, pueden significar un acortamiento del cuello uterino, que a su vez puede ser una amenaza de un parto prematuro.
Esto debe ser tratado rápidamente para intentar pautar las dosis de maduración pulmonar del bebé.
Pérdida de líquido amniótico
Si tienes una sensación de pérdida de líquido por la vagina que no puedes frenar es necesario acudir a un hospital. Sobre todo si ocurre antes de la semana 37 de embarazo. Podría tratarse de una rotura de la bolsa prematura y se debe aplicar antibioterapia.
Los movimientos fetales cesan
Notar que tu bebé se mueve es posiblemente el mayor signo de bienestar que podemos tener. Por ello, si notas que tu bebé deja de moverse y no responde a los estímulos a los que antes sí, deberás ir al médico para que compruebe que el bebé se encuentra bien.
Tensión arterial elevada
Si en un control de la tensión notas que tienes una tensión por encima de 140/90, es conveniente que acudas a tu centro de salud para que te puedan hacer un estudio analítico y un control de tu tensión arterial. Todo ello para descartar que puedas presentar algún estado de hipertensión provocado por el embarazo.
Estos son los signos de alarma más comunes que se te pueden presentar en el embarazo. Tenlos presentes.
Aunque no te preocupes, lo normal es que todo vaya bien y que tu embarazo concluya de una forma satisfactoria. Te aconsejamos que te centres en disfrutar del embarazo pues es un momento que nunca más se repetirá y que debes aprovechar.